Ya sea por la propia esencia de los espacios de piedra excavados de las canteras, donde algunas leyendas sitúan el nacimiento del mito cretense, o por la morfología laberíntica de las canteras de extracción manual, la visita a las Canteras de s’Hostal adentra al paseante por un auténtico laberinto, que puede ser vivido como un paseo lúdico entre jardines, o como un viaje iniciático.
El hilo de Ariadna de este laberinto es el lenguaje de la piedra declinado de mil maneras: piedra tallada, grabada, horadada, erigida… Esta naturaleza múltiple del espacio impregna la acción de Lithica en s’Hostal. Las intervenciones en el terreno potencian la particular personalidad y las morfologías de las canteras invitando al paseante a descubrir su la magia de su identidad.